Why and why not

Ni preguntar por qué, ni preguntarse por que no.
Hay situaciones en que las respuestas son tan ambiguas,
que nos convencemos que es mejor ir viviendo
sin preguntar tanto, tanto todo el tiempo.

Pero la propia naturaleza nos acosa
con signos de interrogación a cada paso.
Y la ilusión de una vida sin respuestas,
sin excusas, sin causas ni consecuencias
se diluye sin más, con la salida del sol.

¿algo que decir? aquí es donde.

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s