Lo que mata

Lo que mata no es la humedad.

La humedad cansa, agota, deprime tal vez, pero no mata.

La humedad  hace crecer el musgo. Y el moho.

La humedad enferma, quizás, un poco. Pero no mata.

Casi nunca mata.

La humedad recrudece viejos dolores de huesos y cicatrices.

La humedad humedece.

La humedad, si persiste, moja. O empapa.

Pero lo que mata, lo que de verdad mata, es la ansiedad.

¿algo que decir? aquí es donde.